Salvando a Mystral ( Det te prohibo que postees ¬¬)

Feltraxian se abrazo a si misma y a su enorme habrigo negro. Hacía un par de horas que habían llegado a Zunivembai despues de un par de largisimos dias viajando sin descanso. Le dolía todo el cuerpo. Había viajo noche y día, junto con sus compañeros, sin descansar, solo podía pensar en Mystral, en lo mucho que le quería y en que no sabia el tiempo que le quedaba, no podía malgastar ni un solo minutos. Se frotó los brazos, allí haca una frío tremendo, al que no estaba acostumbradada ella. Llevaba colgada de los hombros una maleta con un saco de dormir, una pequeña bolsa de piel con dinero, con todo el dinero que tenía, por si acaso lo necesitaban en el viaje de vuelta y una muda limpia y en la mano portaba un baculo de magia blanca de los que había en la clase, había robado uno, pero pensaba devolverlo en cuanto llegara. Podría hacer algo, por poco que fuera; y si no siempre podia dar golpes.
- Ya ha caído la noche - Dijo ella y su aliento se transformo en bolitas de humillo que desaparecieron al instante - Podríamos descansar, aqui hace mucho frío.

Habia pensado mucho en Aidan esos dos dias. Le habia engañado para poder ir a salvar a Mystral y le echaba muchisimo de menos. Llevaba dos dias isn verle y sabia que pasaria aun más tiempo antes de poder verle otra vez. No me habia dado cuenta hasta entonces de cuanto le necesitaba, pero no podía volver. Tenia que seguir allí se lo debia a Mystral .
Miré a Feltraxian y sacudí la cabeza.
-No es buena idea Fel.... hay bestias, mosquitos... ademas, tenemos que llegar hasta los lagos de Zunivembai pronto o no podremos hacer nada por Mystral.
Cada palabra que articulaba hacia nacer un vaho pesado que ascendia al cielo atravesando las copas de los áeboles. Estaba cansada pero queria salvar a Mystral y volver cuanto antes. Mientras más tardase peor seria el enfado de Aidan cuando regresase.

Seguí silenciosamente al grupo, sin decir algo, no le parecía lo más adecuado intervenir en conversaciones en las que no estaba incluido así que simplemente pasó de ser participativo.

Detrás de mí venía la castaña que era mi compañera de trabajo con cara neutral, seguramente buscando y recordando donde había dejado el cuerpo del único hijo de Mystral. Realmente se había sorprendido cuando se enteró que Alexiel estaba viva, sin embargo no hizo preguntas.

Tus pensamientos se me hacen más claros que tu voz Damek, deja de darle vueltas a eso, después te explicaré escuchó a sus espaldas, era la inconfundible voz de Alexiel "Entonces dejad de espiar mis pensamientos, se que puedes hacerlo" simplemente pensó, teniendo la certeza que le leía los pensamientos en aquel instante

Una imagen humanoide descendio frente a ellos del cielo, reflejado por la luna la piel del vampiro parecia tan o mas blanco que la nieve. Miro con sus ojos rojos a todos los precentes y dijo con voz calmada y majestuosa... propia de el:
Mi nombre es Zardeth Maberley, es un gusto conoceros y en el caso de los ya conocidos -hizo una leve seña a Damek con la cabeza en forma de saludo- es un gusto volver a encontralos. Tengo claro en sentido de vuestra mision... incluso he mantenido con vida en mas de una vez a Mystral... en que os puedo ayudar?
Un halcon blanco descendio del cielo posandose en el hombro de Zardeth.

Fel miro al chico y agradecio tener alguien mas de ayuda
- Ola - Saludo ella al chico - Y-yo soy Feltraxian - Tatamudeo a causa del frío. - ¿Vamos a detenernos a descansar si o no? ¿Que os parece?
Pregunto al resto del grupo.

Miré al muchacho que se nos unió con esceptismo, sin saber si debia fiarme de él o no. Adelanté la diestra para estrecharle la mano.
-Soy Déteka Lark.-Dije. Ante las palabras de Fel me giré hacia Alexiel y Damek. Yo ya habia expresado mi opinion ahora k dijesen ellos.

Alexiel salió de detrás mío y se puso en frente al vampiro con actitud desafiante pero sin dejar de ser cortés Alexiel Kriosselle para servirle y después de presentarse fijó su mirada en la menor de todos Si mi memoria no me falla, quedan unas cuantas horas para encontrarnos con el cuerpo del pequeño, por lo que nos debemos apresurar, después de eso, y en ese lugar, podremos descansar, aquí hay demasiadas bestias presentes concluyó. Seguramente decía eso porque escuchaba los pensamientos de sed de sangre que tenían aquellas criaturas, y yo sinceramente en ese ámbito no me sentía capaz de contradecir a mi compañera de equipo Lo siento srta. Feltraxian pero lo que dice mi compañera es cierto, es mejor proseguir fue mi comunicación telepática para con todos excepto Alexiel que leía mis pensamientos incluso antes de formularlos

- Bien, de acuerdo, sigamos pues - Dijo ella mientras comenzaba a caminar de nuevo.
El ambiente era frío y lugubre, y en aquellos momentos solo deseaba estar en su habitación de la academia, en su cama, durmiendo tranquilamente, pero aquello por lo que se encontraba en tan desolado lugar era mucho mas importante.
Sus alas estaban incomodamente plegadas sobre su espalda por culpa de aquel abrigo, pero su rabo se movia inquieto, en movimientos bruscos, arrastrando la punta de la cola por el suelo.
- Deteka ¿Donde esta la tumba de Helios? - Pregunto ella que aun no sabia muy bien donde estaba situada

Asintio la cabeza ante la presentacion de la pelirosa y al ver que los demas seguian caminando los siguio.
Zardeth siguio los pasos de los aventureros... y no le sorprendio escuchar de los labios de la pelirroja que buscaban los restos de Helios. Ante esto simplemente se bajo la capucha para que el frio no entrara en el.... y siguio caminando.
Sintio un aura violetasea semi negrusca bastante fuerte al este...
Esta en esa direccion - dijo mirando a donde sentia el aura y ahora señalaba con su brazo.

Caminaba cabizbaja, en silencio. El frio me calaba hasta los huesos y estaba en alerta, mirando cada rincon en penumbra. La voz de Zardeth me hizo alzar la cabeza y examiné donde indicaba.
-Deberias tener cuidado Zardeth... esto esta lleno de criaturas y creo que un cuerpo muerto sea capaz de emitir tal aura.
Desenvainé el florete y respionré hondo, caminando donde Zardeth había indicado con recelo. Solo se escuchaba el crujir de las ramas bajo mi peso y mi respiración. Los latidos ritmicos de mi corazón a un ritmo normal, calmado. Escruté la oscuridad y un destello rojizo me hizo girarme bruscamente hacia un lado adelantando el florete. Un rugido a mi izquierda hizo que me girase de nuevo, y entonces lo vi. Era como un perro enorme, amorfo, y sin pelo, con heridas supurantes por varias partes y multiples y enormes colmillos afilados asomando de las fauces. Sonreí, aferrando con fuerza el florete.
-Que empiece la diversión.-Mascullé

Analicé por un momento la situación, la criatura podía ser un licantropo sin posibilidad de regresión a su forma humana, por lo que el único lo suficientemente rápido para enfrentarlo en aquel momento era Zardeth por su naturaleza vampírica, no podíamos arriesgarnos a que atacara a otra persona que no fuese él por lo que me ví obligado a usar mi voz, si no funcionaba eso quería decir que la criatura tenía razocinio Criatura sin mente ni corazón y con sed de sangre, no os podreis mover a menos que yo así lo ordene y tal cual la criatura se había dejado de mover, pero el cansancio en mi cuerpo era más que evidente, era un ser muy fuerte y para dominarlo se necesitaba demasiada fuerza magica/vital.

Eres graciosa... -Sonrio y dejo detras de si mismo, un haz de color blanco y negro al dirigirse rapidamente a la bestia.
Intento romperle el cuello, pero el animal se tiro encima de el intantando morderlo en la clavicula... Rapidamente Zardeth se lo saco de encima con una fuerza descomunal, incluso para un vampiro. Lo tiro al suelo y tirando su chaqueta y su mochila a un arbol con increible presicion, destrozo el cuello del animal con una mordida... sangre negra salio de este, la cual el vampiro consumio.
Dejo al animal en el suelo y se dirigio donde estaba su mochila perfectamente colgada en una rama junto con la chaqueta. Su camiza estaba completamente cubierta de sangre negra... Rapidamente y sin mirar el rostro de sus compañeros por pura verguenza de su violenta naturaleza vampirica, se quito la camisa y la metio en una bolsa en la mochila... tambien metio en esta la chaqueta, quedando con el blanco torso descubierto brillando a la luz de la luna.
Sera mejor asi -Dijo con la voz apagada... este vampiro odiaba su naturaleza como tal- permiteme explicarte Deteka... Incluso un muerto despide energia, todos los objetos lo hacen -se dio vuelta y los miro a todos- Cada objeto emite pequeñas vibraciones... yo soy capas de ver eso... Ya he visto el aura de Mystral y de Helios tambien, te puedo asegurar que vamos por buen camino querida compañera. Espero que confien en mi... -dijo esto con cansino pesar

- Yo si confío en ti - Dijo Feltraxian sonriendo a pesar de que inevitablemente había sentido un poco de asqueo al ver como se alimentaba de aquella sangre negra. Lo que ahora se le pasaba por su mente es que debía de tener un frío horrible sin ropa puesta. Se había echado hacía atrás instintivamente, quedando un poco rezagada el grupo, como mucho lo único que podía hacer era quedarse atrás y protegerse como pudiera. Se acercó a Damek y un escalofrío recorrio toda su espalda haciendo que se le erizara el pelo de la nuca y las punta de las alas le tiemblequearan nerviosamente dentro del abrigo al sentir como algo reptaba por su bota y acariciaba desagradablemente la piel de su pierna
- Te......tengo algo.....- Gi-gimoteó mientras se devatía por mirar hacia abajo o preferir no saber que era "aquello" que trepaba por su pierna - ..e-en la pierna.......
Lentamente bajo la cabeza para observar como una serpiente de escamas negras y ojos rojo sangre trepaban muy lentamente por su pierna, pero lo que mas le asusto era la punta de dos afilados colmillos que sobresalia de su boca.

Preferí no mirar el desagradable espectaculo en el que preferi no participar ya que Damek y Zardeth parecian dispuestos a joderme toda la diversion. Me acerqué a Fel al escucharla y vi la serpi8ente.
-Vale Fel... estate.. quietecita...
Susurré alargando la mano izquierda a la serpiente que seguia trepando. La acerqué con cuidado, un poquito más cada vez, intentando pillas el pescuezo de la serpiente cuando esta menos lo esperara. Agarré la sepreinte por el pescuezo y la alegé de la puerna de Fel rápidamente. La serpiente se revolvia en mi mano, intentando alcanzar mis dedos con los colmillos y la tiré al suelo, cortandole la cabeza de un tajo con el florete.
-Bueno.. esto ya esta... dejemosle la carne a los carroñeros y sigamos, el tiempo apremia.